miércoles, 17 de agosto de 2011

De relaciones y sus encantos

De lo más interesante y avivador entre dos, el respeto y la admiración. Son los elementos eternizadores.

El respeto es la mayor riqueza, en su ausecia asaltan las decepciones, la decadencia o la vulgarización de las relaciones.

La admiración, interesante y satifactoria en su plenitud, un arma de doble filo si además llega al grado de idolatración. 

El nexo del amor carnal, del cuerpo a cuerpo, con la idealización, la inmensa lejanía del amante.

 Déjame ignorar, dime verdades a medias, y que tus ojos me encojan el corazón por desconocer, sé dueño de aquello que es privado por naturaleza, pero no olvides el precio de la deslealtad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario